lunes, 17 de mayo de 2010

oh no dulce delirio
te veo en los sueños reales
te apareces como viento en la mañana
vienes sola y a veces con tierra entre tus faldas
fria en las mañanas y tibia por las tardes
pasan y pasan los horas
y las presas caminan por nuestras fauces
oh desgracia, vida mia
que los deboras como al tubo de espacio las olas
y esta es una y otra de las cosas
por las que yo tengo siempre un manchon en el regazo
nuestras decencias siempre dependientes del contexto
no hay demora en nuestros roses
y no hay conciencia en nuestros besos
no hay ni un numero en el telefono
nunca es la constante saber de tus sentimientos
pero siempre me encuentro con las puertas de tu aliento
en una esquina, en una casa, en un recuerdo
no te vas ni te pierdes
sigues en el contraste del verde y el morado
es un va y ven cambiante
las ondas de tus vibras hacen el menear de tu cabello hipnotizante
que causa en mi corazon un pensamiento degradante
mientras hago composiciones porcentuales en una lluviosa tarde
en un oxido ferroso esta tu olor a rosas metalicas y almendras
que me recuerda una tarde febrerosa de verano mezclando memorias e ideales
que me recuerda la triste y siempre en suplicio vida de ser amantes irreales

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